A Germán Pacheco lo esperaron bastante en Independiente. Exactamente 554 minutos para su primer gol. Su incorporación a comienzos de la temporada había generado más expectiva entre los hinchas que la de Facundo Parra, pero el ex Chacarita le terminó ganando el puesto para el que lo había elegido Daniel Garnero. Había tenido dos chances en el primer tiempo, la más clara desaprovechada por pifiarla mano a mano con Migliore. Su gol redentor fue a los ocho minutos del complemento, cuando Martín Gómez ganó la posición tras camisetar a Bottinelli y se la cedió al ex Atlético de Madrid. “Yo no vi foul”, dijo el delantero. Y prefirió relatar su satisfacción personal. “Fue un terrible alivio el gol. Ultimamente hasta estaba sin concentrar... Estoy contento, pero lo más importante era sacar un buen resultado. Ojalá ahora pueda debutar en la Copa Sudamericana, que es lo que más quiero”, explicó. Y consideró que podrá meterle “un poco de presión” al Turco Mohamed para que el jueves lo incluya en la revancha ante Tolima (ida 2-2).
“Hasta el gol estaba ansioso, pero traté de pensar con tranquilidad, sabía que la oportunidad iba a llegar”, contó. Y fue irónico cuando le preguntaron si se encontraba cómodo jugando con Martín Gómez. “Me siento bien jugando entre los once”, comentó. Y reveló que en el festejo de su gol escenificó a una aleta porque se lo dedicó “a un amigo que le decimos tiburón porque cuando se ríe se le ve un colmillo”.
-Llegaste a pensar que si seguías sin meter un gol en diciembre ibas a tener que irte.
-No, sólo pensaba en trabajar por una oportunidad.
Y el DT ya tomó nota: “El gol le va a servir para recuperar confianza. En las prácticas se mata”. Ya dio el primer paso.
Olé
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