La verdad, es algo hermoso que la gente te aplauda. Soñé tanto y de maneras tan distintas mi salida de la cancha en mi debut... Pero vivirlo es algo único”.
Nicolás Martínez está chocho porque pudo jugar desde el arranque en Independiente y porque el Rojo ganó en la Sudamericana. ”Sabía que lo importante era conseguir un triunfo en nuestra cancha y así arrancar bien una nueva etapa, como nos dijo el técnico”, contó el enganche que ayer reemplazó a Gracián y ahora está en duda para el partido con Arsenal porque se fue acalambrado del Libertadores de América. “Me sentí muy cómodo, intentando asistir, asociándome con el Cuqui... Perdí dos o tres pelotas que debía, pero no quiero quedarme con esto. Quiero mejorar y no conformarme”, cerró.
Diario Olé
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