En charla con el programa Indirecto, a Borghi le preguntaron por Independiente, uno de los tres cubes que dirigió en el país, en el que tuvo su primera experiencia y en el que mucho no duró. Y habló: "Es muy duro perder un partido y salir a un paredón de fusilamiento, donde te preguntan si te vas o te quedás. Si decís que sí, dicen 'éste se puso un límite' y si decís que no, dicen 'éste es un caradura'"
Más allá de hablar de su buena relación con Comparada y Cacho Vázquez (el dirigente que estuvo más cerca suyo), opinó que "se hace difícil porque todo el mundo habla de proyecto y el proyecto es el siguiente el partido". En una fecha en el que se están yendo técnico, comentó que "es una suerte de costumbre que en estas fechas se vayan algunos entrenadores y que algunos nos mantengamos, pero solamente domingo a domingo. Entonces uno quiere ganar el partido y no importa el cómo. Así, los jugadores se ponen tensos y perdemos en calidad de fútbol".
Diario Olé
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